Parece que el champú sólido está de moda. Y aunque a muchos sonará raro esto de un champú sólido (nada que ver con los de toda la vida), sus ventajas hacen que sea una moda que está para quedarse.
Empiezo por una ventaja que no es ni de lejos la principal, pero que alegrará a más de uno: el avión. Aunque la utilización de este champú se basa en el cuidado del ambiente y en disminuir la huella de carbono, hay ocasiones en las que debemos hacer un viaje y no sabemos cómo llevar champú sin facturar maleta. Pues ¡aquí está la solución!
Aunque no sea el motivo más noble, fue el que me llevó a probarlo. Con un viaje de 2 días por trabajo (esta vez a mi cuidad natal, Lisboa, para un Taller de Gestión de Estrés), el avión era la mejor opción para el trayecto. El tiempo es oro y en mis viajes no me gusta utilizarlo facturando maletas. El problema es siempre el champú, que acabo por comprar en el destino y dejar más de la mitad. Realmente no es por el dinero, que un champú no vale tanto, pero si quieres luchar contra el cambio climático debes empezar por reducir el consumo. Al ser sólido, este champú se puede llevar en la maleta de mano ya que puede pasar a cabina. Solucionado problema de champú en los viajes.
Para no seguir haciendo spoiler de las ventajas del champú sólido, os cuento qué es exactamente.
Qué es un Champú sólido?
Cómo muchos de los grandes descubrimientos, surgió de una forma accidental. Creando una base de jabón sólida, se verificó que ésta producía más espuma que los jabones normales. Entonces sus creadores empezaron a añadir otros productos de origen natural (plantas, frutas, aceites esenciales) y lograron un champú sostenible y muy práctico que supera los 80 lavados.
De origen natural, sin parabenos ni sulfatos, es ideal para todos los tipos de piel, incluso las más sensibles. Además, les añaden aceites esenciales que estimulan el cuero cabelludo.
En resumen, un champú sólido es similar al champú convencional pero con más ventajas.
¿Cómo utilizar?

Se aplica directamente en el pelo mojado y se masajea suavemente. Al principio se pude notar una textura diferente pero con el tiempo los cambios en la suavidad del cabello será más que evidente.
- Moja muy bien tu cabello
- Desliza la pastilla de champú por el cuero cabelludo (utiliza poca cantidad, la espuma irá saliendo poco a poco)
- Masajea suavemente
- Hacer una segunda aplicación (en la primera saldrá muy poca espuma pero en la segunda aplicación la cantidad de espuma ya será mayor)
- Aclara con abundante agua (este paso es, de verdad, muy importante. De no hacerlo, no se eliminan en su totalidad los restos de champú y el pelo se quedará con un aspecto graso)
- Deja la pastilla al aire para que se seque.
Ventajas del champú
Si vas a empezar a utilizar este tipo de champú, te recomiendo leer todas sus ventajas. La parte de tu pelo lo notarás enseguida pero estarás haciendo mucho más que cuidar tu cuerpo. Estarás cuidando tu hogar y el de todos nosotros.
- Lo puedes llevar en el avión. Además de no ser líquido y no tener restricciones, ocupa mucho menos ya que una pastilla de 120 gr equivale a un bote de 750 L.
- Requiere menos agua en su elaboración. Además de la ventaja evidente para el medio ambiente, el hecho de no necesitar tanta agua hace que no sea necesario añadirle parabenos, emulsionantes, siliconas o sulfatos.
- No necesita un envase plástico. Te cobran las bolsas en el super pero luego todo viene en envases plásticos. ¿Le ves sentido? Este champú no necesita un envase plástico. La mayoría viene en un embalaje de papel o cartón biodegradable.
- Lo puedes hacer tu mismo.
- Son biodegradables y no generan un impacto negativo para el medio ambiente.
Cómo elegir el más adecuado para ti
Cómo te comenté, el champú tiene una base sólida a la que se añaden otros productos de origen natural. Son estos productos los que le van a aportar propiedades que te podrán interesar según tu tipo de pelo.
Hay varios champús con distintos ingredientes y sería imposible hacerte aquí una lista detallada de todos ellos. Lo ideal será que pidas asesoramiento en la tienda dónde lo compres.
Otra opción es que aprendas a hacerlo. Aprender a hacer champú sólido, jabones o velas es algo que te aportará momento de relax y diversión, incluso en familia. Te recomiendo que vayas viendo nuestros talleres para que no te pierdas el que más te interese.
¿Preparada para empezar a utilizar el champú sólido?
Luego me cuentas qué te ha parecido y si prefieres el sólido o el de toda la vida.